Habéis trabajado duro hoy, ya habéis cenado y está todo recogido; sólo os queda darle al play aquí abajo, tumbaros en el sofá y cerrar los ojos. Estáis a punto de adentraros en las misteriosas aguas del Mississippi, Allen Toussaint lleva el timón del barco y durante el recorrido os irá desvelando los secretos de Nueva Orleáns. La tripulación la componen grandes músicos como el clarinetista Don Byron, el trompetista Nicholas Payton, el guitarrista Marc Ribot, el pianista Brad Mehldau y el saxofonista Joshua Redman, los cuales nos acompañan en este viaje que el gran pianista Toussaint nos ofrece a través de standards de jazz que van desde Duke Ellington y Django Reinhardt hasta Louis Armstrong y Thelonious Monk. Precisamente el clásico que compuso éste último en 1963 es lo que da nombre a este álbum que Toussaint sacó bajo el sello Nonesuch Records en 2009.
Aunque el jazz no sea común en la carrera de Toussaint y sea sobre todo conocido por su R&B (escuchad el temazo Freedom for the stallion que suena al entrar en su web http://www.allentoussaint.com/), con este trabajo deja claro que es un terreno donde también se siente cómodo y quiere explorar. Así, con la asistencia del productor Joe Henry ha buscado un sonido claro y limpio pero lleno de autenticidad; que respire, pero con peso y consistencia. Del mismo modo, consigue que elementos del jazz moderno cuajen a la perfección con esa esencia del jazz clásico de Nueva Orleáns, dando lugar a un trabajo compacto y un estilo con mucha elegancia y personalidad. Se pueden apreciar grooves tranquilos durante todo el álbum, pero su relajada naturaleza no debería impedirnos que nos demos cuenta de lo creativo que es como instrumentista. Puede que a simple vista el álbum parezca un simple buen rato que ha pasado el pianista con sus colegas, pero si se escucha con atención se podrán apreciar todas las capas que lo componen y lo rica que es su música.
Lo dicho, a disfrutar.