Los donostiarras Yaw vuelven a la carga con su segundo disco largo, y precisamente lo hacen con un discazo que ya avisaban en sus últimos directos.
Si bien los podemos catalogar dentro del screamo, en este disco han bajado un poco el pistón relajándolo a ritmos más post rockeros donde le dan más importancia a las partes vocales, pero también encontramos los frenéticos y desgarradores. Tranquilos, no es un grupo más de post rock saturado y repetitivo que pasa en su gira por L´mono. Pero la verdad es que está muy por encima de sus anteriores referencias.
Son 12 canciones bastante cortas que se entrelazan entre si de manera que muchas veces no te das cuenta del cambio de pista. El típico disco que te dicen "tienes que escucharlo entero", y durará 20 minutos aproximadamente, es como una canción con muchas partes. Destacar también las letras y melodías del cantante, todo en euskera por cierto.
Yaw son un soplo de aire fresco y de las únicas bandas de screamo de Euskal Herria que puedan existir ahora mismo. Si siguen así llegarán lejos.
