Esta semana La Tormenta Perfecta nos pilla en mitad del desierto, donde no existe ningún camino a seguir y cada persona debe encontrar el suyo propio. Que no estés en el camino o no seas capaz de encontrarlo no significa que te hayas perdido, así que no temas y disfruta con la descarga de todas las precipitaciones en forma de reflexiones y canciones relajantes y meditativas, y cuando se haya formado el barro sumérgete en él y a partir de ahí todo será mucho más fácil. Estar hundida tiene sus beneficios, y es que nos da la perspectiva necesaria para ver y analizar todo lo que tenemos por encima o a un lado, y una vez visualizado nos da la posibilidad de intentar alcanzarlo, pero eso es algo que cada una debe llevar a cabo, la tormenta sólo busca la estimulación sensorial y emocional de aquella que esté dispuesta a empaparse.